En estos momentos me encuentro escribiendo el último capítulo de mi nuevo libro sobre la crisis de deuda. Es un libro conceptual y hablo de las crisis globales aunque he tratado como caso actual la crisis del euro, en la que España tiene un capítulo propio junto al resto de países periféricos. Explico la ecuación de sostenibilidad desarrollada por Blanchard y Stanley Fisher en su libro de macro para doctorado cuando ambos eran profesores de MIT.
La ecuación tiene en cuenta las condiciones iniciales de deuda como primera variable. Hasta 2011, este economista siempre usaba como argumento que nuestra deuda era inferior a la media de la Eurozona. Ahora, con 300.000 millones de euros más de deuda y un nivel equivalente al 100% de PIB, ya estamos en zona de peligro.
La segunda variable es el déficit. Eliminan el pago de intereses y usan el déficit primario. En 2013 cerramos con un déficit primario de 40.000 millones de euros, el mayor de todos los países europeos junto a Irlanda. Italia tiene superávit y Grecia y Portugal ya tienen equilibrio primario.
Y la tercera variable es la diferencia entre crecimiento de PIB e intereses de la deuda, usando el dato de PIB como estimador de recaudación. Hoy hemos conocido el informe del IGAE del déficit del Estado del primer semestre. El Gobierno continúa con la propaganda y el titular que han replicado los medios es “los ingresos públicos crecen un 7%”. Pero como suele ser habitual, el Gobierno no dice la verdad.
La recaudación por IRPF homogénea y comparable crece un 3,5% anual. En enero de 2013 no se contabilizó la paga extra a funcionarios de diciembre de 2012 y en 2014 contabilizaron la de 2013. Eliminando ese efecto, que en 2015 ya no se producirá, la recaudación del impuesto crece un 2%. El IVA crece un 5%. El turismo va bien, aunque ha perdido intensidad en mayo y junio, y los extranjeros pagan IVA. Pero el comercio interior está casi estancado como han vuelto a confirmar hoy las ventas de comercio minorista que siguen en encefalograma plano.
¿Cómo es posible que el total de ingresos crezca un 7%? La partida de otros ingresos crece un 24% anual. Una partida denominada diferencias de cambio que el Gobierno presupuestó en 300 millones para todo 2014 lleva hasta mayo la bonita cifra de 4.000 millones. ¿Qué hay detrás de esta partida? El Gobierno está emitiendo bonos que pagan un cupón anual alto. Como los tipos de interés, al igual que en toda la Eurozona, han caído significativamente, los bonos se emiten con prima de emisión. Esa prima se contabiliza como ingresos a cambio de pagar muchos más intereses de la deuda pública en los próximos años.
Es una operación que se ajusta a la norma pero de nuevo el Gobierno está abusando de ella con el fin de maquillar el déficit de 2014, poder bajar el IRPF como último cartucho agónico para evitar la debacle que las encuestas anticipan para el PP en autonómicas y municipales y cumplir con Merkel y Bruselas. A cambio, el siguiente gobierno tendrá que hacer más ajustes y subir más los impuestos para cumplir nuestros objetivos con Bruselas.
Pero con maquillaje contable no se resuelve la insostenibilidad de la deuda. El Gobierno, tras negar el rescate, ahora dice que el rescate bancario nos ahorró no sé cuantos miles de millones en pago de intereses de la deuda. Pero el IGAE dice que los intereses en primer semestre fueron 15.000 millones, un 11% más que en 2013. En el segundo semestre se pagan cupones dos veces (en julio y en octubre) y acabaremos pagando unos 32.000 millones. Eso es un 60% más de lo que pagábamos en 2011, antes de que Rajoy y sus chicos del comando de la austeridad expansiva llegaran al gobierno y acabarán de hundir al país en la segunda recesión.
El Gobierno ha secuestrado los datos de la Seguridad Social a la opinión pública, pero el IGAE los sigue publicando. Entre enero y mayo la recaudación por cotizaciones sociales ha sido ligeramente inferior a la de 2013. ¿Cómo es posible si estamos creando empleo? Se crea poco empleo y a tiempo parcial, bajan los salarios y el Gobierno se ha puesto a regalar subvenciones a la contratación como si el dinero fuera público. La Seguridad Social acumula un agujero entre enero y mayo de 14.000 millones, generado por la diferencia entre ingresos y gastos. A final de año superará ampliamente los 30.000 millones. El Gobierno comenzó el año con 8.000 millones menos de lo presupuestado, por su error de previsión de destrucción de empleo en 2013. Y la desviación lejos de corregirse está aumentando. Rajoy rompió la hucha de las pensiones que tardamos diez años en llenar y se la gastará en una sola legislatura. ¿Quién pagará las pensiones en 2016? El largo plazo para nuestro presidente son las elecciones generales que como muy tarde serán en febrero de 2016.
¿Qué nos dice la ecuación de sostenibilidad de deuda de Blanchard-Fischer? Que los intereses crecen por encima de la recaudación y seguimos teniendo déficit primario. Por lo tanto, la deuda seguirá creciendo muy por encima de lo que dicen las previsiones del Gobierno y de los organismos internacionales. En mayo la deuda pública ya ha alcanzado la previsión que el FMI tenía para final de año. Y la previsión del FMI se publicó en abril.
Curioso país. Un gobierno de derechas que acusa a la extrema izquierda de populistas por proponer impagar la deuda pública, hace todo lo posible para llevar al país al abismo del impago. Estas dinámicas es difícil revertirlas pero no imposible. Como nos enseñó Keynes “cuando piensas que va a pasar lo inevitable, sucede lo imprevisto”. Una nueva figura llamada Pedro Sánchez ha irrumpido con fuerza en el panorama político español.
No conocía personalmente a Pedro Sánchez pero comparto con él edad y buena parte de su programa económico:
i) Plan de inversión europeo.
ii) Presión al BCE para depreciar el euro.
iii) Reforma fiscal para subir la recaudación a grandes empresas y rentas altas.
iv) Reestructuración de la deuda a las familias en riesgo de impago de sus hipotecas y con la amenaza del desahucio.
v) Renta básica para familias en paro con hijos y que hayan perdido su prestación.
Como Ulises, tiene una Odisea por delante. Pero este economista observador le desea que la fuerza le acompañe. Es la única esperanza para liberar a España de este Gobierno irresponsable que nos lleva a los tiempos de impagos de deuda que son los más oscuros de la historia de nuestra querida España.
06.09.2014 a las 06:00 Enlace Permanente
[…] mismo economista, poco sospechoso de radical y crecientemente vinculado al PSOE, reconocía en un artículo reciente que España ya ha entrado en zona de peligro en términos de sostenibilidad de la deuda pública […]
06.09.2014 a las 12:49 Enlace Permanente
[…] mismo economista, poco sospechoso de radical y crecientemente vinculado al PSOE, reconocía en un artículo reciente que España ya ha entrado en zona de peligro en términos de sostenibilidad de la deuda pública […]
08.09.2014 a las 19:35 Enlace Permanente
[…] mismo economista, poco sospechoso de radical y crecientemente vinculado al PSOE, reconocía en un artículo reciente que España ya ha entrado en zona de peligro en términos de sostenibilidad de la deuda pública […]
18.09.2014 a las 11:01 Enlace Permanente
[…] mismo economista, poco sospechoso de radical y crecientemente vinculado al PSOE, reconocía en un artículo reciente que España ya ha entrado en zona de peligro en términos de sostenibilidad de la deuda pública […]